¡PARA TI MUJER!

Una vida bella germinando de otra igual, nacer, crecer y tratar de ser felices, cumplir tus deseos anhelos y sueños, ser dichosa de estar aquí y respirar un aire fresco, encontrándote a ti misma, quererte. Alguien que da ternura heredada de años, quien da todo sin pedir nada en prenda, que ofrece el corazón en bandeja de plata esperando que un afortunado lo aprecie en verdad.
Vida que da más vida, que da amor, que en sus locuras arrebatadas, en sus años mozos quizá se pierda pensando que la belleza lo es todo, y se exhiba como un artículo en un escaparate inusual, para sentirse amada, querida, pero no respetada, no, no eres eso, vales más que una buena imagen que todos admiren y te digan ¡que bella eres!, lo eres aun sin que miles lo externen, lo eres desde el momento en que naciste, lo eres porque eres aun más bella por dentro, lo eres simplemente por el hecho de ser mujer.
Buscas y deseas con quien compartir tus alegrías, emociones, tristezas, y que limpie tu llanto, un compañero, amigo, novio, esposo o todos ellos en uno solo. Ese que vive en tu corazón, en tu pensamiento, y que algunos le llaman complemento, tu otra mitad, tu compañero.
Muchas veces equivocas tu andar, creyendo que por fin ha llegado el indicado, entregas todo tu ser, das todo de ti. Algunas veces no se equivocan, pero la mayoría de las féminas que lo intentan así lo padecen. Viviendo en un mundo que se cree el ideal, el soñado, pretendiendo que aquel ser cambiara sus actitudes por amor, tristemente te das cuenta demasiado tarde que nunca será, que al ser que amas así lo conociste, si él quiere mejorara algunos modos y sino así será toda su vida.
Dulces utopías quedan en tu memoria, ilusiones quedan guardadas sin salir más, y coexisten queriendo no vivir, ensoñaciones imprecisas en un largo edén de la vida, pero la costumbre es más fuerte, pierdes tu sobriedad algunas ocasiones, más que menos, también parte de tu identidad cedida o robada por aquel que no sabe quien está con él, no aprecia la belleza de ser que a su lado esta, una beldad que se marchita con el paso del tiempo y si no llega a darse cuenta, al despertar de ese episodio, ahí se queda por siempre, ahí muere, porque le enseñaron que así debe ser, aprendió que juntos hasta la muerte, aunque al final de sus días termine creyendo que fue feliz sin haberlo sido, que solo fue lo que quiso creer.
Otras ocasiones aquello que queda de lo que fue una mujer, reacciona, se pregunta, si eso es vida, si eso quería, si eso es lo que le espera toda su existencia. El vivir y no vivir, el estar con alguien y no estar, que el paso del tiempo cambio, que ahora ya no sabe donde quedo, aquel que le ofreció su vida, que le dijo que todo sería igual, y que jamás sufriría. ¿Dónde quedaron tantas promesas? ¿Dónde está el corazón escondido? ¿Cómo encontrarlo? ¿Cómo saber que es verdad y que no lo es? Solo son algunas preguntas sin respuesta que con la misma fuerza que llegan desaparecen.
No importa que es lo que sucede, cual es el problema central o qué papel ocupas en la vida de él, si eres esposa, amiga, novia, amante, ese no es el punto eres mujer. Te debes y te deben respeto y ante todo valorarte, y si decidiste estar en el lugar equivocado quizá haciendo sufrir a una de tu genero, nunca dejes que te utilicen de tapete, que te pisoteen y tu quedarte callada porque eres mujer y no puedes hacer nada, estas ahí por una decisión buena o mala pero al fin tu decisión que es respetable y sabes porque lo haces, aunque un centenar lo crea malo. Hay algo que sobresale de todo esto y que ninguna mujer sea lo que sea debe perder, algo tan simple o complicado llamado dignidad, esa que pareciera es fácil de comparar, fácil de adquirir en cualquier lugar, pero que muchas ya la han perdido, que durante la rutina de sus vidas y la convivencia con su príncipe azul jamás supo donde quedo. Quien te ame no debe desear para ti lo malo, al contrario dará su vida por ti, porque te sientas bien, porque tu vida a su lado sea en cada amanecer algo nuevo, algo diferente, él no permitir que te ofendan, que te maltraten, que te humillen, que hagan de ti algo que nunca quieren para sí. Antepondrá su vida misma para que seas feliz.
¿Sueño? Si quizá otro más de los que sueles tener, pero esto es real en la medida en que despiertes de la pesadilla que se convierte tu vida, en el momento en que decidas ya no más, hasta aquí…….ese será el inicio de algo nuevo, y no con la esperanza de encontrar al que si te apreciara, eso solo es parte de lo que ahora será tu vida. El estimarte y recobrar la dignidad hace milagros en tu actitud al cambiar ésta, modificas automáticamente tu imagen, te vez más bella, irradias una luz que es apreciada por muchos, sobresales cuando antes estabas escondida en las tinieblas de tu ignorancia, ahora eres tú la mujer que estaba escondida y que no se permitía salir por miedo, por el que dirán, porque así te enseñaron. Cambias en tu forma de pensar y más aun en la imagen que das a los demás, porque ahora ya no serás la señora de………. ¡Ahora eres tú! Un ser único e irrepetible como lo es cada ser humano, ahora después de haber reivindicado, después de haber errado mucho, sabes que eres tú la dueña de tu vida, de tu tiempo, de tu espacio, la que debe estar bien, la que se debe querer, la que siempre debió ser y que ahora se enfrenta a un mundo en donde el varón sigue con la supremacía, en donde es él quien gobierna porque es el sexo fuerte, por lo que debes prepararte cada vez más para estar compartiendo ese espacio que no solo es de ellos, y porque no ,quizá dentro de ese mundo masculino encuentres aquel que siempre vivió en tu corazón en el lugar menos esperado, recuerda que siempre que se cierra una puerta hay otra mejor que ya se abre. Y si no lo encuentras y vives sola, ¡no estás sola mujer!, no te sientas así, nunca lo estarás en tanto sepas vivir, sepas gozar de todo esto que tenemos, este maravillosos mundo con bellos paisajes, con aire aún limpio, con la tibieza del sol sobre tu piel, con la placidez que te deja el ser mujer, con todo lo inimaginable, y sobre todo porque tienes muchas personas que te quieren, hermanos, padres, amigos, hijos, que saben lo mucho que vales, que nunca te dejaran sola, estarás sola si así lo decides.
Hay pocos hombres que realmente saben que a su lado tiene una mujer con quien comparten su vida entera, hacen de ella una obra de arte, y de su vida algo más que vida.

“Un pensamiento, un sentir compartido para aquellas mujeres que aun viven sin vivir y que aun están a tiempo de ser lo que siempre debieron ser”

Alma Delia Castro Rosas

KEKENENA